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La Actitud y Cambio de Actitudes en el Deporte


Actitud y Cambio de Actitudes en el Deporte

1. DEFINICIÓN DE ACTITUD

La actitud es la forma de actuar de una persona, el comportamiento que emplea un individuo para hacer las cosas.

Para fomentar una buena actitud en el deportista, es necesario trabajar este aspecto desde su inicio en el deporte y es preciso el trabajo educativo y la formación de valores con el objetivo de desarrollar una buena conducta.

Es fundamental, también, el trabajo educativo y de formación de valores con el objetivo de desarrollar la personalidad de los deportistas juveniles. Para ello proponemos:

■ Tener presente el rol del entrenador como educador y su responsabilidad ética.

■ Ante la presencia de conflictos, el entrenador realizará un trabajo individualizado con la información que se le ofrece y de ser necesario, se consultará con psicología.

■ Fomentar la confianza en sus propias posibilidades, la competitividad no debe orientarse hacia la comparación con los demás, sino hacia uno mismo. Lo que resulta verdaderamente útil es el propio progreso, el ser más hábil, más fuerte, es decir, dominar la tarea cada vez mejor.

■ Orientar a los jugadores para que aprendan a comprender el verdadero valor de la competición y, por tanto, de la victoria o la derrota.

■ Fomentar las motivaciones intrínsecas centradas en una mejora de la ejecución de la tarea restando cierta importancia a la victoria o derrota.

■ Asumir tareas en las que el beneficio común prime sobre los intereses personales.

■ Al establecer sanciones, es mejor privar al deportista de algo que sea valioso para él, no utilizar actividades físicas como castigos, pues pueden volverse adversas. De igual forma, no debemos castigar al deportista sin la práctica de actividad física ya que ese no es nuestro objetivo.

 

2. MODELOS DE CONDUCTA

Hay distintos modelos:

■ Colérico: puede ser muy efectivo en deportes de combate y fuerza rápida si se autocontrola su energía negativa. Se adapta con facilidad a situaciones nuevas por lo que puede ser positivo en deportes con juegos con pelota. Es recomendable utilizarlo en acciones de ritmo rápido donde la táctica esté determinada. Presenta cambios cíclicos de la actividad y va de una intensidad brusca a la disminución de ésta. Los descontroles de la conducta y la tendencia a una actitud agresiva es sinónimo de fracaso. Manifiesta fuerza de voluntad en la lucha.

■ Melancólico: inadecuado en la toma de decisiones importantes así como en deportes que compitan por intentos e inadecuados en juegos con pelotas. Suele utilizarse en situaciones tranquilas de juego y debe ser observado y mantenido bajo control en situaciones precompetitivas.

■ Flemático: se utiliza en los análisis tácticos y son de gran valor en situaciones de estrés competitivo. Manifiesta persistencia y paciencia. Es autocontrolado pero con poca iniciativa. Después de un largo tiempo de entrenamiento se puede trabajar con empeño en busca del éxito, donde se logra en deportes que requieren estabilidad en las emociones, constancia en los hábitos (tiro, remo, fondo) y afrontan una serie de deportes que requieren rapidez en el cambio de situación.

■ Sanguíneo: se adapta rápido y sin mucho esfuerzo a situaciones nuevas de competencia y entrenamiento. Se da ante situaciones estresantes de juego, encuentra rápidamente la seguridad necesaria, influye positivamente sobres sus compañeros y levanta su estado de ánimo. Son muy necesarios en deportes por equipo donde, con mucha frecuencia, son el alma del equipo.

 

3. TEMPERAMENTO

El temperamento es el carácter de las personas, está  vinculado a la manera de ser y a a la forma de reaccionar de los sujetos; por lo tanto, el temperamento tiene que ver con la interacción con el entorno.

Se dice que un individuo tiene mucho temperamento cuando sus reacciones son vehementes e intensas.

La habilidad de un ser humano para adaptarse dependerá en gran medida de su temperamento. Es habitual  que una persona debe entrentar diversas dificultades y adversidades en su vida cotidiana: se necesita un determinado temperamento, según cada contexto, para superarlas. El manejo de las emociones y de los estados de ánimo también está vinculado al temperamento.

El sistema nervioso y los genes determinan el tipo de temperamento:  por eso se dice que éste es natural, más allá de las influencias que puedan tener en él la educación y el entorno social. Una persona de fuerte temperamento deberá luchar durante toda su vida para controlarlo ante una situación de estrés ya que, de lo contrario, prodría acarrearle problemas.

No hay temperamentos buenos ni malos para el deporte. Lo que sí es válido es el entrenamiento deportivo y el responder a las situaciones competitivas independientemente de las características temperamentales.

El entrenamiento deportivo acorde a las características temperamentales es uno de los retos del deporte contemporáneo y a su vez una necesidad desde las edades más tempranas por ello proponemos:

■ Observar y controlar los estados de ansiedad y perturbación de los deportistas inestables durante el entrenamiento y competencia.

■ Pueden manifestar cuadros de ansiedad que requieren del uso de técnicas de autocontrol y relajación.

■ El deportista estable asimilará mejor situaciones competitivas y de entrenamiento.

■ Para resolver situaciones de tensión y decisión competitiva, situar a deportistas estables.

 

Diferenciación entre temperamento y carácter

Encontramos una histórica diferenciación entre temperamento y carácter. El primero lo será para lo fijo, corporal, heredado, mientras que el segundo está reservado para lo psicológico.

A su vez el temperamento es subdividido en cuatro grandes grupos: el sanguíeno (alegre, afectivo, excitado); el colérico (irascible); el flemático (apático, poco comunicativo, aislado) y el melancólico (depresivo, abatido).

El carácter sería la forma de ser de una persona. Su reacción frente a cualquier reacción. Si reacciona mal, insultando, dando voces o algo similar se puede decir que tiene un carácter duro. Pero si ocurre todo lo contrario, se pude decir que tiene un carácter blando.

 

4. JUEGO LIMPIO O FAIRPLAY

El Juego Limpio o Fair play en inglés, es una expresión muy utilizada para denominar el comportamiento leal y sincero además de correcto en el deporte, en especial fraterno hacia el contrincante, respetuoso ante el árbirtro y correcto con los asistentes. La preocupación por el juego limpio ha ido en aumento en todo el mundo, ante la reiteración de conductas deportivas cuestionables, no sólo por parte de los jugadores, sino también por parte de dirigentes, sponsors, padres y familiares, árbitros, entrenadores y público.

El juego limpio tiene como meta una especial importancia para los niños y adolescentes en una época en la que la profesionalización comienta a incidir sobre los deportistas a edades cada vez más tempranas.

El juego limpio tiene como objetivo recuperar el sentimiento de 'jugar', como una actividad naturalmente satisfactoria, agradable, honesta y divertida. Un aspecto esencial está relacionado con la significación que para la sociedad tienen las nociones de ganar y competir: la descalificación del acto de no ganar.

El juego limpio no es solamente ganar, sino aceptar perder. También le llamamos juego limpio, al jugar sin hacer ningún tipo de trampa y respetando al compañero sin groserías ni cosas similares. En los niños y adolescentes en esa edad les importa mucho ganar y no el bien estar y el buen juego. En esto es importante que para no generar discusiones ni peleas se respete al adversario y se sepa ser un buen perdedor. En caso de ganar no restregárselo a la cara de los perdedores.

Los entrenadores deben, principalmente, respetar la persona del deportista, absteniéndose de realizar actos denigratorios, cuidando su salud aunque ello pueda disminuir el rendimiento deportivo, promoviendo el respeto por los oponentes y manteniendo él mismo una actitud cordial con los otros entrenadores.

 

Juego limpio para deportistas

Las sugerencias sobre juego limpio para los deportistas está principalmente dirigidas al disfrute del hecho de jugar, a no realizar intencionalmente simulaciones o acciones no permitidas por las reglas sin necesidad de control externo, a no discutir nunca las decisiones del árbitro y sobre todo al buen trato con los oponentes y compañeros por igual, incluyendo el reconocimiento expreso de las buenas acciones que ellos realizan, aceptando las derrotas con dignidad y las victorias con sencillez y moderación.

Un componente importante del juego limpio, aunque pueda ser contradictorio, es el deseo y la voluntad genuina de ganar, que debe poner cada deportista. No querer ganar, es una falta de respeto a todos los demás jugadores que estén en juego.

Actualmente se han introducido nuevas normas o reglas para los deportistas para que el juego limpio sea respetado, ya que hay muchas personas que hablan mal de otros equipos o realizan campañas publicitarias para discriminar por decirlo así a otros equipos.

 

Juego limpio para entrenadores y dirigentes

Los entrenadores deben principalmente respetar la persona del deportista, absteniéndose de realizar actos denigratorios, cuidando su salud aunque ello pueda disminuir el rendimiento deportivo, promoviendo el respeto por los oponentes y manteniendo una actitud cordial con los otros entrenadores.

 

18 Reglas del juego limpio

1. Nunca protestes al árbitro.

2. Respetar al contrario.

3. Saludar deportivamente, tanto si se gana como si se pierde.

4. Respetar las instalaciones deportivas.

5. No protestar en los cambios. Es un menosprecio al compañero que te sustituye.

6. No discutir durante el transcurso del partido con los compañeros.

7. Animar al compañero que falla. Fallar es humano.

8. No responder nunca a las provocaciones del contrario.

9. Respetar las decisiones del entrenador.

10. En caso de lesión de un contrario, pérdida de la bota, o cualquier otra circunstancia extradeportiva, no aprovecharla para marcar gol.

11. No pedir jamás al árbitro que saque tarjeta a un contrario.

12. Evitar chocar con el portero. Es preferible no conseguir gol que lesionar a un deportista.

13. No realizar entradas por detrás. Son muy peligrosas. Un gol se puede remontar. Una lesión no.

14. En caso de recibir una entrada dura, aceptar las disculpas del rival, si se producen.

15. No perder tiempo a propósito para conseguir ganar un partido.

16. El deporte es un juego para divertirse y mejorar físicamente. Por tanto, no hay que obsesionarse con la victoria.

17. Si el rival es muy inferior, no lo desprecies ni te ensañes con él.

18. Los partidos se juegan y se ganan o se pierden en el terreno de juego. No hagas reclamaciones posteriores como que si el árbitro nos ha perjudicado, etc.

 

5. ACTITUD EN EL DEPORTE COLECTIVO

Favorecer la socialización, cooperación-integración: La cooperación es una de las principales características del trabajo en grupo. Los participantes se aúnan en la consecución de algo que es de interés común. La libertad que plantea el deporte educativo estimula y desarrolla la entrega individual para la consecución de una meta colectiva. La integración se produce cuando el alumno es plenamente partícipe y favorecedor de la dinámica del grupo. Favorecer la dinámica significa, ya no sólo participar del grupo, sino también actuar como impulsor de la dinámica del equipo, actuando como protagonista voluntario y comprometido y promoviendo el espíritu solidario.

Hay que considerar que el rendimiento deportivo es una combinación de preparación física del cuerpo y preparación psíquica de la mente; si no se atiende a estos dos aspectos puede ocurrir que se rompa el equilibrio emocional que debe poseer el deportista sometido a tensiones específicas de su actuación.

En sí misma, la tensión no es negativa: simplemente nos espolea y nos lleva a actuar. Incluso los hechos que la inducen pueden ser de carácter agradable, sobre todo en el ámbito deportivo, donde la mayoría de los jóvenes comienzan gozando con su participación y se sienten altamente motivados para aprender y practicar conocimientos y estrategias que les ayudarán a ser mejores. De hecho, el deporte competitivo proporciona la primera y mejor oportunidad para enseñar a la juventud cómo dominar la tensión y el estrés

Para mantener los mecanismos internos de estimulación y dirección se requieren, además, las llamadas: capacidades reguladoras, que pertenecen a las anteriores, pero que se separan por su significado específico, ya que constituyen el verdadero factor decisivo para superar los elevados rendimientos. De la correlación de ambas depende el éxito o fracaso de los resultados deportivos, ya que frente a dificultades internas u obstáculos externos asumen el papel de capacidades de dirección, mediante la voluntad, fuerza de decisión, autocontrol, valor, perseverancia - concentración, persistencia de la concentración, etc.

 

6. EDUCACIÓN BASADA EN LA EXISTENCIA DE CONFLICTOS Y SU RESOLUCIÓN

Educar no para suprimir la agresividad, que en principio es positiva para el crecimiento de la persona, sino para facilitar el control de las tensiones y evitar que los conflictos se resuelvan de manera violenta.

Educar para fomentar la autoafirmación, la autoestima y la confianza en uno mismo puesto que lo contrario, si no nos aceptamos a nosotros mismos, no estaremos en condiciones de favorecer estas cuestiones en los demás y de tener confianza en el grupo. La violencia puede surgir porque uno mismo no se siente valorado, pero también porque no se respeta a los demás como personas.

Educar para la tolerancia de la diversidad, porque las diferencias y discrepancias entre las personas, en definitiva, lo que nos están ayudando es a crecer, a conocer nuevas perspectivas, puntos de vista diferentes, etc., que no tienen porque ser incompatibles con los nuestros si se consigue establecer puntos de encuentro.

Educar para el compromiso con la justicia y para que, cuando aparezcan situaciones contrarias a ella y no deseables, se manifiesta la desobediencia.

 

7. RESULTADO FINAL

El resultado final es que todos los deportes pueden enseñar multitud de cosas que tienen beneficios a corto y largo plazo.

Por todo lo expuesto, consideramos que no sería atrevido, recomendar la existencia de un Reglamento Disciplinario deportivo unitario para todas las modalidades deportivas, donde todas las conductas estuviesen ordenadas por afinidad y divididas con sus criterios en atención a la gravedad.

Está, que la revisión de las normas, no es la única acción dirigida a erradicar la violencia en el deporte. Se han argumentado medidas pedagógicas, implantación de una nueva cultura deportiva, medidas éticas, arquitectónicas, etc.

Pero de todas las reglas deportivas constituyen una pieza fundamental en la organización del deporte.

Entonces... ¿Influyen las normas de disciplina deportiva en las actitudes que generan violencia en el deporte?


Categoría: Dinámica de Grupos, Dinamización GrupalAgregado por: TAFAD



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